El Mundo-�������������� �����������������������������������������Diciembre 01, 2003

 

Fernando Mugica, �Venezuela cierra la frontera con Colombia en pleno 'reafirmazo',�

Caracas afirma que pretende evitar as� irregularidades en la recogida de firmas para celebrar un refer�ndum contra Ch�vez. 

Venezuela, Firmazo. Recogida de firmas para convocar un refer�ndum sobre la permanencia de Hugo Ch�vez. Venezuela cierra la frontera con Colombia para evitar irregularidades en la recogida

     CARACAS.- El cierre de algunos puestos fronterizos entre Venezuela y Colombia es un intento desesperado del presidente venezolano, Hugo Ch�vez, para distraer la atenci�n de un hecho evidente: el reafirmazo, o sea, la recogida de firmas para poder derribarlo del poder a trav�s de un refer�ndum, esta siendo un �xito imparable.

     El vicepresidente venezolano Rangel justifico ayer el bloqueo fronterizo afirmando que, seg�n informes de Inteligencia, se estaban introduciendo en el pa�s personas con cedulas de identificaci�n falsas para engrosar el n�mero de firmas contra el Gobierno.

     A la oposici�n no le hace falta emplear estos trucos. Aunque no se tendr�n cifras oficiales del resultado hasta que el CNE, el Centro Nacional Electoral, no lo haya revisado del todo a finales de diciembre, es un secreto a voces que los dirigentes de la Coordinadora Democr�tica han tenido que explicar a sus bases que rebajen el entusiasmo para no provocar la reacci�n de Ch�vez ante un �xito excesivamente abultado.

     En la noche del viernes ya se hab�an recolectado casi los votos suficientes como para que el refer�ndum de revocaci�n del presidente sea un hecho en la pr�xima primavera. Seg�n marca la Constituci�n, serian necesarias las firmas de un 20% de los 12 millones de electores de Venezuela para poner en marcha la consulta sobre si el presidente debe abandonar o no su puesto.

     Tanto la Fundaci�n Carter como el resto de los observadores internacionales han reconocido que las jornadas de recolecci�n de firmas, que terminaran hoy lunes, se han desarrollado con absoluta normalidad. Unos pocos disparos al aire, gritos de rabia de algunos manifestantes partidarios de Ch�vez y discusiones pacificas por detalles de procedimiento, son los �nicos incidentes que pueden destacarse.

    Uno de los principales dirigentes de la oposici�n, Enrique Mendoza, gobernador del Estado de Miranda, explicaba ayer que el mayor problema con el que se encontraban era el que en algunos centros se hab�an terminado las papeletas, por lo que hab�an tenido que cerrar sus puertas. Se habilitaron medios de transporte para que los que quisieran firmar pudieran trasladarse hasta los centros en los que todav�a quedaban papeletas.

     Futuro Catastr�fico

     Los analistas se preguntan ahora cual ser� la actitud de Ch�vez ante las previsibles y catastr�ficas consecuencias del reafirmazo para su futuro inmediato. Las papeletas con las firmas de los ciudadanos estar�n custodiadas desde hoy en acuartelamientos militares. Existe la preocupaci�n de que el Gobierno pueda tener la tentaci�n de manipular los resultados durante los 30 d�as preceptivos de verificaci�n de firmas.

     En caso de que esto sucediera, Venezuela puede estar abocada a un enfrentamiento de terribles consecuencias. Todo parece indicar, sin embargo, que los militares se decidir�n en esta ocasi�n por hacer de guardias de circulaci�n para manejar de una forma razonable la transici�n.

     Dicen en su entorno que Ch�vez conserva la calma y el buen humor pero que cada d�a se siente m�s solo. Su libro de cabecera, seg�n declaraciones de su vicepresidente, es uno que recopila los documentos desclasificados sobre el golpe militar de Chile y la intervenci�n de la CIA en aquellos acontecimientos.

     El presidente bolivariano puede buscar cualquier tipo de excusa para su fracaso pero hasta los que fueron los m�ximos partidarios de su revoluci�n reconocen que, a pesar de haber tenido todos los medios a su alcance, Ch�vez no ha sabido gestionar los recursos para aliviar la pobreza de la mitad de su poblaci�n.

     La experiencia de un procedimiento constitucional y pacifico en Venezuela para eliminar del poder a un presidente provoca temor en los pa�ses del entorno, cuyos mandatarios ven con enorme preocupaci�n el precedente venezolano.

     De cualquier forma, el futuro de Venezuela, con Hugo Ch�vez o sin el, no es un lecho de rosas. Queda poco de aquel pa�s que en la d�cada de los anos 60 pod�a presumir de ser el mayor consumidor mundial de champa�a o de tener el aeropuerto para aviones privados con mas trafico del planeta. La poblaci�n se ha multiplicado y el mana del petr�leo ya no da suficientes beneficios como para vivir tumbados al sol.